domingo, 4 de enero de 2015

EL DELTA CADA VEZ MAS SEGURO

Por Norberto Ralt

Lo afirmo como una declaración de principios: jamás me verán exponiendo excusas baladíes ni me engancharán saliendo con marineros bengalíes. Yo digo las cosas así, de frente mantecol, al que le guste bien y al que no, me ne frega un cazzo. No me vengan a parar en el río para pedirme retractaciones públicas porque no lo haré. No acostumbro a disculparme por las verdades que escribo. Si el maestro Chueng - A quiere demostrar sus dotes de judoca conmigo me encontrará bien dispuesto al encontronazo. No me asustan sus torpes movimientos amenazantes, por el contrario, me dan risa pues a usted parece que la ha dado la garrotera del Chavo cuando pretende asustarme con ese jueguito de manos y de piernas al que llama arte marcial. Le advierto maestro, no me busque porque va a salir lastimado. Gravemente lastimado.
No es mi deseo aburrir con las “internas” palaciegas del Boletín Isleño por lo que voy a pasar rápidamente al tema del día que es el combate contra la delincuencia. Se sabe que la marginalidad viene creciendo en forma alarmante. La escoria gana los ríos y arroyos de nuestro hermoso paraíso. La porquería humana se pavonea frente a nuestros ojos en forma impune. La mugre social nos acecha. La comunidad los desprecia. Hay llamados a ejercer justicia por mano propia. Se pide sangre, pena de muerte, lapidaciones públicas, amputaciones de manos, castraciones, decapitaciones, ahorcamientos, linchamientos, fusilamientos y medidas ejemplificadoras para acabar con los achacos. El vacío generado por la ausencia del Estado en materia de seguridad nos lleva a caminar por la cuerda floja y, por momentos, deseamos limpiarnos el trasero con la Declaración Universal de los Derechos Humanos y con la Constitución Nacional.
 Sin embargo, y a través de ciertas decisiones políticas coyunturales, han llegado a la isla más efectivos y nuevo personal para engrosar las filas de las fuerzas de Prefectura y Policía. La importante determinación fue tomada directamente por la presidenta y por el gobernador bonaerense, quien jamás le ha negado una mano al delta. Ambos impartieron estrictas órdenes a sus funcionarios de seguridad para que intensifiquen, redoblen y hasta tripliquen, los esfuerzos tendientes a que nuestra comunidad recobre su tradicional, pacífica e histórica forma de vida apacible.
Al ser cuestionadas por su falta de operatividad, las excusas dadas por la Prefectura y  Policía, van desde explicaciones que dan cuenta tanto de la falta de personal como de la carencia de parches para los gomones que hacen agua porque están pinchados. Al respecto, el gobierno ha tomado debida nota de la problemática enviando cuarenta efectivos más a las Prefecturas locales, veinte vigilantes extras a la Policía y cuatro (4) cajas de Poxitas para poder emparchar algunos de los botes que se encuentran desinflados e imposibilitados de salir a navegar.
Los gomones última generación podrán volver a navegar gracias
a la ayuda del gobierno.
La autoridad local de Prefectura no pudo ocultar su entusiasmo públicamente, cuando en una conferencia de prensa, manifestó que: “La incorporación de los nuevos efectivos viene a cubrir un gran déficit que tenemos en materia de personal. Del envío de las cajas con Poxitas… ¡ni que  hablar! Tenemos ocho gomones pinchados con equipamiento militar de última tecnología y motores fuera de borda inteligentes guiados desde el espacio por láser, que están tirados, muertos de risa en el Canal de San Fernando, al lado de la villa, porque no tenemos los recursos necesarios para emparcharlos.” Más adelante se refirió a las vacantes que serán ocupadas por los recién llegados: “treinta de los cuarenta efectivos se verán afectados a la recientemente creada “Delegación de Cebadores de Mate” porque, tal y como estamos ahora, no podemos seguir brindando la misma calidad y excelencia que nos caracteriza si los encargados de atender al público no se encuentran a gusto en su lugar de trabajo, siempre con un matecito bien calentito cerca. Es claro que no se puede andar atendiendo a la gente con la yerba en una mano y la constancia de matrícula en la otra. Parte del personal recién llegado se abocará inmediatamente a esta tarea, pues claro… ¡los mates no han de cebarse solos! Los recursos humanos, se podría decir, han llegado en el momento justo. Figurensé que el otro día me tuve que atar los cordones de mis zapatos yo solo para ir a un acto ya que mi edecán se encontraba con gripe y no había podido concurrir al destacamento”, afirmó el funcionario naval. Llama la atención que de los diez efectivos restantes ninguno fue destinado a atender los teléfonos por lo que el mismo alto oficial aseguró: “En ese sentido todavía tenemos un déficit de personal debido a que no podemos cubrir toda la problemática con solo cuarenta hombres que nos llegan de refuerzo. Para la próxima intentaremos poner alguno al lado de un teléfono. Vamos paso a paso. Primero lo primero.”
Guiadas vía setélite desde el espacio, las lanchas
de Prefectura no pueden salir al río porque están
agujereadas. 
La Policía también se vio beneficiada en el revoleo de nuevos agentes que fueron distribuidos inmediatamente de la siguiente forma: Cuatro efectivos terminaron en la “Unidad de Supervivencia Policial”, comúnmente llamada “Unidad de Pizzas y Empanadas” que tiene por fin ocuparse de los almuerzos, meriendas y cenas del personal que, a veces, pasa varios días desarraigado de sus hogares y lejos de sus familias protegiendo a la población de los cacos que andan remando a hurtadillas por las noches. Dos uniformados fueron a parar al sector “Pesca”, una sub área de la “Unidad de Supervivencia”. Los cuatro restantes darán salida a las notificaciones que envía la fiscalía archivando causas. El comisario principal comentó que: “Es tan grande el cúmulo de denuncias archivadas por los fiscales que no damos abasto para notificar a la gente de que toda la exposición y el trabajo que se tomaron al dar la cara para frenar a los chorros ha sido al pedo. Ja, ja, ja… En la actualidad algunos vecinos no reciben la notificación y todavía se quedan esperando con ilusión de que vayamos a allanarle la casa al chorro que vive al lado suyo, quien lo amenaza todos los días y le anda usando, en sus propias narices, el fuera de borda que le afanó. Pobres infelices…. El tema es que nos mandan personal pero no tenemos lanchas. Por eso andábamos entrenando a un perro para hiciera de cartero pero en la primera de cambio se aquerenció con unos que estaban haciendo un asado y no volvió más. Un año lo estuvimos adiestrando, daba la patita… todo. Sin ir más lejos, el otro día tuvimos que mandar al Cabo Migueletes nadando con una carta en la boca porque hasta nos afanaron la piragua que teníamos amarrada en el muelle. Fueron tan sigilosos que ninguno de los tres efectivos que se hallaban pescando mojarras los escuchó. Diga que Migueletes nada bastante bien y que tenía que ir acá nomás, hasta el Toro.”
Los cursos de reentrenamiento policial
se realizarán a través de VHS tutoriales del Inspector Ardilla.
En un principio el anuncio de la llegada del ex alcade de Nueva York, Robert Giulliani y del Jefe de actividades antiterroristas israelí, Aroon Goldstein, ambos internacionales y afamados expertos en seguridad generó gran expectativa, pero luego se supo que no serían traídos al delta porque  “los números no cerraban” debido a la elevada cotización de la divisa norteamericana. En cambio, y por unos pocos pesos, los efectivos contarán ahora con una colección de VHS tutoriales, adquiridos a un mantero de Carupá, para dar comienzo a los cursos de reentrenamiento interactivos. Entre los títulos más destacados se encuentran “Los asombrosos casos del Inspector Ardilla y Morocco Topo”, “Las andanzas de Matute en el callejón de Don Gato” y la zaga completa de “Tiburón, Delfín y Mojarrita”, a saber: “Los Superagentes no se rompen”, “La aventura explosiva” y “Los paraguas asesinos”, que serían presentadas por Victor Bo, único sobreviviente del cinematográfico trío parapolicial.  
Interesante es saber que el Estado también ha abierto una línea de investigaciones internas dentro de ambas fuerzas para ahondar en la resolución de ciertas causas judiciales sonantes. Se trata de hechos que terminan siendo esclarecidos más rápido que ligero como el del hombre que, según el informe forense policial, “presentaba una herida en la cabeza producto de haberse resbalado y caído justo sobre un trozo de plomo, de unos nueve milímetros de grosor, que se hallaba tirado en el piso. ¿Quién diría que una fatalidad así podría suceder, no?”, concluye el texto.
Tiburón, Delfín y Mojarrita, serían las bases
para encarar la reforma policial.
En cuanto a las pesquisas realizadas por la Prefectura, llama la atención el caso del joven que apareció flotando, golpeado, atado de manos y con una soga al cuello. El misterio fue resuelto por los inspectores que sentenciaron: “Es evidente que el muchacho se trompezó con tanta mala suerte que, en su caída hacia el agua, se enganchó con los cabos de una piragua que se le enredaron en las manos y en el cogote produciéndole la asfixia. Es una pena que una familia haya quedado destrozada por una accidente así.”
En cuanto a la justicia el panorama es más delicado aún. Para la Procuradora General, “en Tigre y San Fernando los fiscales se rascan los huevos a cuatro manos. No toman denuncias, no ordenan investigaciones, archivan todo, boludean a la gente por decirlo de alguna manera.” No obstante esto, la relación con los medios de prensa locales va de mal en peor desde el desplante que los periodistas sufrieran en una conferencia de prensa convocada por el Doctor Falaz, fiscal de la zona de islas. Con motivo de mostrar los resultados del operativo antidrogas realizado durante el mes de mayo en la Estación Fluvial de Tigre, la fiscalía convocó a los medios en el edificio judicial situado en Rincón de Milberg.  En aquella oportunidad una persona había sido detenida a punto de abordar una lancha colectiva hacia el Delta entrerriano, con veinte kilogramos de cocaína ocultos en cajas de cereales y en paquetes de yerba que transportaba en dos bolsas de arpillera. La “mula” fue procesada inmediatamente y los periodistas llamados a una sorpresiva rueda de prensa pero, ante el desconcierto de los presentes, el fiscal jamás se presentó a dar explicaciones. Luego de una hora y media de espera su asistente se excusó diciendo que: “El Doctor se quedó encerrado en el baño, tomando mate y comiendo Zucaritaas en compañía del Juez de Garantías y no quieren salir. Si desean formularles algunas preguntas pueden hacerlo a través de la puerta, los están espiando por la cerradura. ”   
Las sospechas sobre el desempeño de las instituciones encargadas de cuidarnos de apoco se despejan y la fuerte presencia de los organismos estatales da cuenta de un importante cambio en las políticas de seguridad que se llevan adelante en el plano local. Desde los municipios, el  panorama se completa con la acción de fuerzas ultra profesionales como el CHOT, que todavía se encuentra en estado embrionario, reconociendo el territorio de una región que posee características difíciles en cuanto a lo operativo. Sus responsables políticos declararon que: “Calculamos que nos va a llevar entre veinte y treinta años reconocer a los chorros que asolan a la comunidad. No es tarea fácil pero debemos ser pacientes. Hay que pensar en nuestros bisnietos. Para ellos estamos trabajando hoy.”
Norberto Ralt, tu amigo.













2 comentarios:

  1. Si pudieran cambiar el color de la letra de la nota se leería mejor.Gracias

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  2. Es un problema de configuración de los celulares o de algunas computadoras. En una pc o una notebook se lee con letras negras y fondo blanco.

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