En el día de hoy se llevó a cabo la Audiencia pública por el poryecto Colony Park en el Concejo Deliberante de Tigre. Esta instancia consultiva obligatoria, que debe hacerse ANTES de comenzado el proyecto a evaluarse, se hizo, en este caso, 3 años después de comenzadas las obras, avalando así, una vez más, la estrategia de muchas de estas empresas del “Hecho Consumado”.
Salvo la “bióloga” pagada por Colony Park para firmar un informe de impacto ambiental que todos los expertos no dudaron en tildar de “mamarracho” y “burla”, y que soportó con envidiable cara de piedra todos los golpes, los más de 50 oradores que se expresaron en el día de hoy rechazaron unánimemente el devastador accionar de esta empresa y coincidieron en que debe suspenderse la obra y resarcir a la sociedad por los daños causados.
Hablaron concejales de Tigre, de San Isidro, de San Fernando, (que usaron el recinto para echarse culpas por haber autorizado la futura instalación de un transbordador de automóviles desde la costa hasta el barrio privado).
Julio Zamora, Presidente del Concejo de Tigre, marcando la cancha para el resto de sus colegas, rechazó con la vehemencia del ecologista más acérrimo, -lo que celebramos- el desarrollo de este proyecto que ha devastado la zona más frágil del delta y la vida de más de 15 familias que habitan el arroyo Anguilas y la Paloma.
También hablaron infinidad de acreditadísimos biólogos, urbanistas, expertos en humedales, isleños desplazados y atropellados por la empresa organizados en
Todos, absolutamente todos, y cada uno desde su perspectiva, y con el más ejemplar civismo, rechazó el emprendimiento Colony Park y el modelo absurdo, exclusivista y exótico que pretende instalar en el delta.
Con la documentación en la mano fueron denunciados los funcionarios públicos que permitieron que este crimen de lesa ecología llegara hasta este punto, desde el que ya no pueden desentenderse por ignorancia u omisión quienes avalaron desde sus cargos públicos este desastre.
Luego de lo expuesto por todos estos actores sociales, el unánime rechazo al desastre perpetrado por la empresa, por la legislación existente que impide todo lo actuado, por el Informe preliminar para el plan de manejo del delta presentado en abril con bombos y platillos, por el expreso compromiso de las autoridades municipales de Tigre para frenar este atropello; por todo esto, solamente con una genialidad sofística para esquivar la ley que merecería los mayores aplausos, podría continuarse con este proyecto y no ser castigados los responsables de este crimen.
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